El maltrato hacia los animales por parte del ser humano llega a puntos inimaginables y en este caso la víctima es una de las vacas que vive en la granja que posee el futbolista Miguel Ángel Borja en Tierra Alta, Córdoba, departamento de Colombia. El goleador se ha instalado allí durante el aislamiento decretado durante la pandemia del coronavirus, pero se ha topado con un hecho espantoso.

Según él mismo denunció en sus redes sociales, y más tarde ante las autoridades, un grupo de jóvenes de la zona irrumpieron en el lugar y atacaron sexualmente al animal: “Unas personas llegaron hace unos días y la violaron, la maltrataron y la dejaron así”, señala el delantero en un video que difundió y en el que muestra cómo quedó la vaca. Allí se ve que el bovino apenas tiene fuerza para tomar y comer y no puede levantarse: “Hace muchos días que está así”, aseguró.

El delantero del Junior de Barranquilla Miguel Borja, hizo una indignante denuncia, ya que personas inescrupulosas ingresaron a su finca ubicada en Tierra Alta, Córdoba y maltrataron a sus vacas.

Borja indicó que una de las vacas fue violada y se encuentra en un estado grave:  "Esta vaca fue víctima de violación y maltratos hace unas noches atrás, por un grupo de jóvenes que se la pasan por el sector del Rosario y el Virgilio Vargas consumiendo drogas y creyéndose los dueños de la zona’’, dijo Miguel en un video que publicó en Facebook.

El delantero del ‘tiburón’ continuó con su denuncia diciendo: ‘’Es hora que esto cambie, se dediquen a buscar de JESÚS y aprovechen ese tiempo para cosas productivas, por favor, madres y padres de familias estén más pendientes de sus hijos", comentó el jugador.

Por el momento la Policía anda realizando trabajos de investigación en la zona y así dar con los responsables de los terribles actos. Además, la vaca que fue violada fue atendida por veterinarios y se encuentra en recuperación.

Miguel Borja denuncia la violación de su vaca

En la descripción del video, Borja escribió que los autores de esta violación fueron unos jóvenes que se la pasan consumiendo drogas por el sector del Rosario y el Virgilio Vargas, en Tierralta, Córdoba.